Libero Andreotti
Libero Andreotti
Libero Andreotti nace en Pescia el 15 de junio de 1875. Por todo el período de su juventud trabaja en la oficina de un herrero, después de los diecisiete años se traslada a Lucca donde estrecha relaciones con el mecenas Alfredo Caselli y el poeta Giovanni Pascoli que lo inician al mundo del arte.
Gracias al tío Ferruccio Orsi obtiene en Palermo un trabajo con el editor Sandron como ilustrador del semanal socialista «La Battaglia». De todos modos en 1899, desilusionado por los ambientes isleños, vuelve a Florencia donde encuentra trabajo en una tipografía. Relativamente tarde, alrededor de 1902, inicia a modelar en arcilla en el estudio de Mario Galli, alentado por los amigos Galileo Chini, Oscar Ghiglia y Adolfo De Carolis.
En 1906, habiéndose trasladado a Milán, su obra impresiona a Vittore Grubicy de Dragon que lo alienta a participar en la VII edición de la Bienal de Venecia de 1907. Es en la capital lombarda que en 1906 Andreotti se agrega al grupo de los divisionistas.
Del 1907 al 1914 se queda en París donde es influenciado por Bourdelle y J. Bernard. En 1911 expone con una exposición personal en la Galérie Bernheim Jeune y seguidamente en el Salon d’Automne, obteniendo un notable éxito. En París se verifica en Andreotti el abandono de las experiencias juveniles impresionistas y la consiguiente orientación hacia la investigación de la compacidad en la masa plástica.
Después del estallido de la Primera Guerra Mundial será forzado a volver a Florencia donde enseñará en el “Istituto d’Arte” y estará en dirección del llamado cenáculo del «Antico Fattore». En estos años su búsqueda se dirige hacia lo monumental, con referencias a la escultura románica y al “Quattrocento” florentino. Incluso por una cierta estilización la producción en mármol y bronce será abundante. Pertenecen a este período los monumentos a los Caídos de Roncade (1922), el monumento a los Caídos de Saronno (1924), el monumento a la Madre Italiana en Santa Croce en Florencia (1924-1925), el Cristo resucitado en el Arco della Vittoria en Bolzano (1928) y el grupo de Africo y Mensola en la Galería Nacional de Arte Moderna en Roma del 1933.
Los últimos años de su vida los pasó en Florencia, donde se convirtió en animador del ambiente cultural ciudadano. Muere en Florencia el 4 de abril de 1933.